La justicia brasileña ha pedido que no se le dé un cargo público a un hombre que confesó haber aprobado un examen de opción múltiple respondiéndolo aleatoriamente. El examentomante, José Santos, recifense, dijo ser analfabeto y muy suertudo.
¿Y dónde quedó el factor suerte en la vida? ¿Y el factor falsedad? Porque las probabilidades de aprobar un examen de opción múltiple lanzando respuestas al azar son, asumiendo que el examen tenga varias preguntas y más de tres respuestas, bajas. Muy bajas. El caballero debe haber copiado-- pero al hacerlo ha demostrado tener una de las habilidades más valiosas que se pueden poseer en un cargo público: el buen ojo.
Porque Santos debe haber elegido a través de un elevado proceso de pensamiento crítico quién de sus compañeros podría ser el más opcionado a saber las respuestas correctas. Este hombre sabe valorar bajo presión cuál es la decisión óptima para el momento justo. Y además sabe delegar.
¿Qué mejores cualidades para un cargo público se pueden exhibir? ¿No es esta persona la más adecuada para ser un servidor del estado? Es mañoso, ágil, oportunista y le encanta que otro haga su trabajo por él. El único defecto que posee, desde donde veo, es el de ser honesto-- si se hubiera callado aquello de ser analfabeto nada habría pasado. Seamos realistas, ¿cuánto necesita leer un funcionario? Verdaderamente me sorprende que no lo quieran otorgar el cargo, y me sorprende aún más que nuestra gobernación no le haya contratado ya.
Noticia de AFP vía Yahoo
Foto por Ségozyme
3 comentarios:
Yo fui seleccionado para representar a mi colegio en unas olimpiadas de matemáticas, luego de adivinar las respuestas de un examen de opción múltiple. La prueba tenía alrededor de doscientas preguntas. No me di la molestia de resolver un puto ejercicio. Odio las matemáticas.
¿Cuántas opciones habían por ejercicio?
una
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