Sobre la famosa, conocida y re-conocida vuvuzela

Quizás la vuvuzela no os suene, queridos lectores, como algo conocido, pero su sonido seguramente os suena --sobretodo a aquellos que estén viendo los partidos del mundial y no estén, como yo, en horas de oficina-- pues es el instrumento musical aquel que están usando en Sudáfrica para "animar" a los jugadores que disputan la Copa Mundial de Fútbol. Su sonido es un melodioso si que hace que los estadios parezcan nidos de avispas. El incansable sonido acompaña las casi dos horas de partido, volviendo locos a futbolistas, comentaristas y espectadores, pues si bien hay quienes aprecian el sonido -como el propio Sepp Blatter-, parece que hay un consenso mayoritario de que esta resta al fútbol más de lo que suma.

El escándalo de la vuvuzela llega a los 127 decibelios, lo que la hace más sonora que un tambor, una sierra eléctrica y hasta el mismo pito del árbitro, por lo que se está recomendado usar tapones para las orejas en los estadios, los cuales se venden con el nombre de "para-vuvus".

El que está haciendo el marketing que estos productos es un genio. Primero saca el equivalente a Helen Keller tocando la trompeta y luego, con la otra mano, te vende los tapones. El tipo solito ha inventado un problema y una solución. "Vuvezela", según algunos, significa "hacer ruido", dicho sea de paso, por lo que hay que felicitar a su inventor no sólo por el ingenio que tuvo al crearse su propio monopolio, sino también al nombrarlo.

¿Molesta la vuvuzela? Yo creo que sí. Podrían haber tenido los sudafricanos la mínima cortesía de por lo menos sacar otras con tonos distintos y armónicos, pero los muy desgraciados tenían que quedarse en el monotono.

Si así es como funcionan los mundiales en África, ¿cómo serían en países como, por ejemplo, China? ¿Estarían Enrique y Ana cantando "disco disco disco disco chino chino chino chino fino fino fino fino… filipino"? A todo esto, ¿qué mismo tienen que ver las Filipinas con el disco en cuestión? ¿Es o no es chino? Porque si es chino chino chino chino no me vengas luego con que es filipino. Gracias.


Noticia de la BBC
Foto de Axel Bührmann