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lunes, 6 de agosto de 2007

Dejemos de Culpar a los Vigilantes

El Jueves pasado salía del bar, después de haberme tomado solamente medio trago, i, llegando a la Pedro Menéndez Gilbert me paran los vigilantes, diciéndome que iba a 120- cuando mi carro es tan viejo pero tan viejo que a duras penas marca hasta 50. Millas. En fin, a estas alturas del partido he visitado la carcel de la Comisión tres veces, me han citado en cinco ocasiones, me han detenido incontables otras, i la última vez que renové la matrícula de mi carro tuve que cancelar como 5o dólares en contravenciones como "invasión de carril" o "exceso de velocidad".

A lo que quiero llegar es que ya nada me sorprende en el ámbito de la mañas de la Comisión de Tránsito, i cuando me detuvieron la semana pasada yo sabía bien como funcionaban las cosas: Generalmente, te mandan la parada de que acabas de hacer algo gravísimo i que te tienen que llevar a la cárcel, donde seguramente morirás violado, etc. Para echar cuento los manes son el éxito. Bueno, para no alargar la historia, los tipos querían 50 dólares i como yo no tenía efectivo, los tipos, muy amablemente, me llevaron al cajero del Banco Bolivariano de la avenida Las Monjas. Como no funcionaba el cajero automático, fuimos al c.c. Albán Borja.

A veces la gente dice que los vigilantes son corruptos i todo, pero yo me puse a reflexionar en ese momento: "¿quién le quita a los vigilantes ser unos tipos buen-dato que le quitan el dinero a los ricos para dárselo a los pobres, como Robin Hood? ¿Por qué asumimos que el billete que nos sacan los cabeza-de-queso no es donado al Innfa o a Unicef? ¿Por qué asumimos que los miembros de la Comisión se quedan con ese dinero i lo gastan en esa casa que se están construyendo en Sambrondón? ¿Por qué tienen que ellos ser los malos i nosotros las víctimas?

Si nosotros, los que tenemos carro, somos los culpables de que la sociedad necesite proveer un servicio de regulación, ha de ser en parte por nuestra impericia al conducir. 1613 personas fueron victimas de algún tipo de accidente de tránsito el año pasado. 436 perdieron la vida. Cuando el presidente Carlos Julio Arosemena Tola formó la Comisión de Tránsito, lo hizo pensando en esos desgraciados que no se pueden tomar medio trago tranquilamente i que andan por ahí, a 120 por hora, como un verdadero accidente en potencia.

Por eso es que yo respeto a los honorables de la Comisión; sí, es una institución corrupta, pero así como va la cosa, a nadie se puede culpar por sacar dinerito desde donde se pueda. Además, ¿quién dice que después de darles 50 dólares a los vigilantes uno no queda completamente sobrio, listo para irse a casa? ¿Quién duda de la bondad del hombre? ¿Epicuro? ¿I qué sabía ese man? ¡Nada! Dejemos de acusar a la CTG, que ellos nos cuidan de nosotros mismos, i hasta que se compruebe que el dinero que ellos nos quitan es usando para fines personales, pues que no se los juzgue.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa foto de Epícuro mostrando una barba espectacular con esa aura roja y su mirada sin iris me hace bajar la mirada. Creo que solamente al contemplarla estoy sintiendo la sapiencia filosofal entrando en mí como por ósmosis. Más de Epicuro.

Jorge Luis Pérez Armijos dijo...

Gracias. Lo de las sombras i el rojo se lo puse yo-- tengo por ahí una foto de una escultura del pana, pero ese primer plano viene directo desde Google. El escudo de la comisión también lo hice yo, i me quedó mucho mejor que el BSC que usé hace poco. Ese Epicuro es un bacán i tiene unas paradojas que te llevan a una dimensión abstracta impensada. No sé si sea lo mío ese tipo de cosas, pero el hace maravillas de extrapolaciones filosóficas es "Josebo", el de "El Ser: Principio de Todas las Vainas".

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